martes, 13 de noviembre de 2012

Comparación de libros antiguos y nuevos (" Mi querida Escuela")

Para empezar he de decir que me han sorprendido algunos de los materiales que he podido observar en “Mi querida escuela” pero me han resultado interesantes y me ha hecho pensar sobre la evolución de los materiales didácticos que se han ido utilizando en la escuela. Pienso que esto último es fundamental puesto que debemos ser conscientes de que tanto la sociedad como la educación ha cambiado y esta cambiando constantemente por lo que los maestros deberían de ir modificando los materiales didácticos y educativos que enseñan a sus alumnos. Hoy en día, muchos maestros si que son conscientes de ello y saben que no se puede seguir utilizando cuadernillos o fichas que ayudan a leer y escribir porque no es la mejor manera, es mucho más practico y enriquecedor enseñarlo utilizando por ejemplo las tic, los empaquetadores multimedia o más recursos que hoy en día están a nuestra disposición. Además no solo refuerzas el proceso de lectura y escritura sino que también se enseñan temas transversales, como por ejemplo aprender a manejar las nuevas tecnologías que hoy en día son fundamentales en nuestra sociedad.

De esta manera para poder realizar una comparación de la evolución que se ha producido comenzaré comentando los libros que usaban en la escuela entre los años 1930 hasta 1939 aproximadamente. Así en dicha época, he podido ver libros de caligrafía y escritura. Me ha llamado la atención que a la hora de enseñar a leer y escribir eran muy rígidos, es decir cada niño no tenía la libertad de hacer sus cosas personales puesto que todos seguían un caligrafía semejante por lo que las letras de todos ellos eran prácticamente iguales.

Posteriormente, esto se dejó de hacer pero sin embargo se han seguido utilizando durante muchos años, metodologías de aprendizaje por memorización y a base de copiar las cosas las veces que hicieran falta para que se aprendieran. En este grupo es donde me incluyo yo, ya que durante mi periodo escolar, nos enseñaron a leer y escribir apoyándose en los famosos cuadernillos Rubio, los cuales eran unos cuadernillos de caligrafía en los que copiábamos una y otra vez las diferentes letras para que la grafía de las mismas nos salieran bien.

 
 



Actualmente, la metodología de enseñanza acerca de la lectura y escritura ha cambiado bastante pero no lo suficiente. Sin embargo, para los niños de hoy en día es más divertido aprender las letras puesto que se las introducen desde más pequeños (actualmente se les enseña a leer y escribir sobre los 4 años) en forma de cuentos donde aparecen las letras como personajes. Además utilizan como hemos mencionado anteriormente los recursos tecnológicos, así es, que para repasar este aprendizaje realizan actividades en empaquetadores multimedia u otros recursos informáticos.


 



En cuanto a la lectura y la prelectura creo que ha evolucionado a la paz que la escritura, han cambiado los formatos para realizar actividades y demás pero la metodología no ha cambado lo suficiente.

Los profesores en la actualidad, utilizan páginas webs de educación infantil puesto que éstos tienen la ventaja de que permite al niño escuchar la pronunciación cuando se pasa el cursor por cada una de las silabas.

Sin duda, pienso que son un recurso muy útil además de que existen un montón de ellos.
(Juegos en inglés y en catalán, lectura y escritura, juegos matemáticos…)

Existen juegos con diferentes temáticas como es el caso de Mi planeta animado, dividido en espacios como letras, números, o medio. Dentro de ellos hay a su vez varios ejercicios. En el caso de números es muy divertido porque te aparecen los dígitos arriba del cero al nueve y si pulsas encima de ellos una voz infantil te dice el nombre de cada uno de estos.

También hay juegos en catalán o en ingles como El caracol serafín o Pingu. Además de recursos para la escritura y lectura (cuentos como la vaca Connie…)



En definitiva, es notable la mejora de recursos que se pueden utilizar en la escuela. Gracias a esta comparativa puedes observar de forma muy clara la evolución de los libros antiguos y los recursos que se utilizan en la actualidad que no tienen por qué ser libros, dado que hoy en día tenemos muchas más opciones (empaquetadores, soft, páginas web….) de manera que a los niños le resulte mucho más atractivas, sencillas y vistosas las actividades.

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